sábado, 30 de abril de 2011

La foto de la muerte

El periodista Santiago Leguizamón tenía en su poder una fotografía que comprometía al entonces presidente Andrés Rodríguez con personas denunciadas por vínculos con el narcotráfico, entre ellos el acusado de su asesinato, Fahd Yamil, y Pablo Escobar Gaviria, revela un artículo que circuló en la noche de este miércoles.

Por Andrés Colmán Gutiérrez

Santiago Leguizamón tenía en su poder "una fotografía comprometedora" en la que aparecían juntos el entonces jefe del Cartel de Medellín, Pablo Escobar Gaviria, junto al empresario fronterizo Fahd Yamil y el entonces presidente paraguayo, Andrés Rodríguez Pedotti, según revela el consultor en comunicación Vicente Brunetti, sugiriendo que esta sería la principal razón por la que asesinaron al periodista hace 20 años.
En un artículo divulgado a través de las redes sociales de internet, Brunetti cuenta que Leguizamón -quien fue su compañero de estudios en la Carrera de Comunicación en la Universidad Católica, en los años 70-, lo visitó en su casa en Lambaré, en noviembre de 1990 (cinco meses antes de caer acribillado por las balas de los sicarios, en la frontera de Pedro Juan Caballero) y le mostró la fotografía.
"Mirá, vos que siempre andás escudriñando 'cabos sueltos'..., acá tenés un 'General' para tu banco de datos...", le dijo Santiago a Brunetti.
"Me pasó una foto en la que aparecían cuatro personas. A una de ellas no reconocí", recuerda el comunicador.
"En la foto aparecían, juntos y sonrientes, el jefe del Cartel de Medellín, Pablo Escobar Gaviria; Fahd Yamil, Andrés Rodríguez Pedotti, presidente de la República y una persona desconocida para mí, por lo que le pregunté de quién se trataba. 'Ah..., es de la DEA', me dijo", relata.
"La visita que Santiago me había hecho a fines de noviembre de 1990, fue para pedirme que quite y oculte fuera del país la foto que me mostró y otros materiales que no alcanzó a precisar, sabiendo que al mes siguiente debía viajar a Europa", destaca Brunetti.
"Santiago prometió volver con la foto y los documentos que mencionó. Pero las cosas se complicaron y no lo pudo hacer, por lo que nunca más volví a ver la foto (salvo en un relato descriptivo que hizo un periodista argentino, pero que no menciona al agente de la DEA) ni tomé conocimiento de los demás materiales", precisa el comunicador.
"Una vez de vuelta al país, Santiago me llamó por teléfono en la segunda semana de abril de 1991, pidiendo que nos encontráramos 'para entregarme aquello'. Pero, de nuevo se complicaron las cosas y el encuentro ya no pudo realizarse", recuerda.
Leguizamón fue asesinado por sicarios de la mafia el 26 de abril de 1991, Día del Periodista Paraguayo, en plena avenida internacional entre las ciudades de Pedro Juan Caballero (Paraguay) y Ponta Porá (Brasil). La Justicia paraguaya no fue capaz de esclarecer el crimen, que continúa en la total impunidad, sin un solo detenido por el caso.

CONFIRMACIÓN. La esposa de Santiago Leguizamón, Ana María Morra, ya había hablado del caso de la presunta fotografía de Rodríguez, Yamil y Escobar Gaviria al periodista argentino Jorge Elías, del diario La Nación de Buenos Aires, quien la entrevistó para un informe elaborado por la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) en el 2006.
En el artículo "¿Quién me ha robado el mes de abril?" sobre el caso Leguizamón, publicado en el sitio web Impunidad.com de la SIP, Elías relata: "La mujer de Leguizamón, Ana María Morra, radicada con sus hijos en Asunción por aversión a la inseguridad en Pedro Juan Caballero, sabía que su marido tenía una foto comprometedora. Tan comprometedora que la Embajada de los Estados Unidos estaba interesada en obtenerla".
"Posaba en ella, al parecer, el jefe del Cartel de Medellín, Pablo Escobar Gaviria, con Yamil y Rodríguez, presidente de la República hasta 1993".
Nada se habló de la foto durante el proceso judicial, signado por la lentitud, las irregularidades y la ineficacia", recuerda el relator de la SIP.
"Santiago iba a revelarla a la vuelta de un viaje a Europa, al igual que unos documentos también comprometedores -me dijo Morra, en un bar de Asunción, cinco meses después de que se cumplieran 15 años del asesinato a sangre fría, impune como el primer día-. Cuando llegué a Pedro Juan, tras su muerte, no encontré la foto ni los documentos. La casa no era un lugar seguro", sigue relatando Elías.
El informe de la SIP revela también que "uno de los hijos de Fahd Yamil era ahijado del presidente Rodríguez, militar que, tras el Golpe de la Candelaria, encabezado por su par Lino Oviedo en 1989, había sucedido a otro militar, Alfredo Stroessner, dictador vitalicio desde 1954".
"El presidente Rodríguez, censurado por el gobierno de los Estados Unidos por supuestos vínculos con el tráfico de drogas y por las sospechas que provocaba el origen de una inmensa fortuna que incluía casas de cambio de moneda extranjera e importantes propiedades, murió en 1997 en Nueva York como consecuencia de un cáncer de colon. "No descansaremos hasta atrapar a los asesinos", había dicho después del crimen. Ni él ni sus sucesores, Juan Carlos Wasmosy, Raúl Cubas Grau, Luis González Macchi y Nicanor Duarte Frutos, demostraron interés en resolver el primer homicidio de un periodista en la historia contemporánea de Paraguay", agrega Jorge Elías.

sábado, 12 de marzo de 2011

Los indígenas sojeros de Puerto Barra



Por Wilson Ferreira y Andrés Colmán Gutiérrez
PUERTO BARRA, ALTO PARANÁ

Con un cántico ritual en su idioma originario, que agradece a la naturaleza por haberles otorgado una excelente cosecha, los pobladores de la comunidad indígena Aché de Puerto Barra Tapyi, a 130 kilómetros al Sur de Ciudad del Este, dieron inicio a la recolección de las 100 hectáreas de soja mecanizada, con un alto rendimiento de entre 3.500 a 4.200 kilos por hectáreas.
Dos potentes cosechadoras, alquiladas a productores sojeros brasileños, iniciaron los trabajos, mientras los indígenas acompañaban la tarea con un tractor y una sembradora ya perteneciente a la comunidad, sembrando en seguida semillas de maíz de entretiempo, tipo “zafriña”, para recomponer la fertilidad del suelo y producir la rotación de cultivos.
“Si todo sigue muy bien, en poco tiempo ya vamos a disponer de los fondos necesarios para comprar nuestras propias cosechadoras”, anuncia Ángel Tatugui, cacique primero de la comunidad.
Desde el costado del camino, los miembros de la comunidad observaban atentamente la labor de cosecha. Muchos de ellos, principalmente los niños, adolescentes y mujeres, llevaban el rostro adornado con pinturas rituales, como signo de celebración. Varios invitados compartieron la ceremonia, entre ellos los intendentes municipales de Naranjal y Santa Rosa, y el presidente de la Unión de Gremios del Paraguay (UGP), Héctor Cristaldo.

MODELO DE AUTOGESTIÓN. La comunidad Aché de Puerto Barra Tapyi está asentada en una propiedad de 821 hectáreas, de las cuales 240 están mecanizadas y explotadas para la agricultura. Tienen 100 hectáreas de cultivos de soja, 100 hectáreas de maíz y las restante 40 se componen de rubros para autoconsumo.
Se dedican a la agricultura desde 1983, desde entonces han evolucionado en el aprendizaje y uso de herramientas de trabajo. Hoy cuentan con tres tractores, y una plantadora para siembra directa. Mantienen sus reservas de bosques y ríos, donde enseñan a los niños las técnicas ancestrales de caza y pesca, con el uso de implementos tradicionales como el arco y la fecha, heredado de sus antepasados silvícolas. Igualmente desarrollan un plan educativo que revaloriza su idioma originario, sus cánticos y danzas, pero se abre a nuevos aportes culturales como el uso de computadoras y elementos de tecnología de punta.
Los Aché también se dedican a la cría de unas 40 cabezas de ganado vacuno, con producción de leche, queso y yogurt, para consumo y venta; cría de 60 cabezas de ganado porcino, y están incursionando en la piscicultura, con dos piletas para cultivo de tilapia.
Por su exitoso modelo de autogestión, fueron premiados entre los Personajes Destacados del 2010 por los periodistas del diario Última Hora.
Uno de los muchos elementos pintorescos observados ayer, fue ver al docente indígena Timoteo Torigui, filmando la cosecha de soja con la cámara de su teléfono celular 3G. Explicó que utiliza las filmaciones audiovisuales en sus clases didácticas.

PROSPERIDAD. Gracias a la exitosa producción agropecuaria, la comunidad Aché “no le debe nada a nadie”, sostiene el cacique Angel Tatugui.
“Todo lo que hoy tenemos es gracias al trabajo y al esfuerzo de las 38 familias Aché que habitamos en Puerto Barra. No perdemos nuestra tradición, al contrario la mantenemos, y ese mismo esfuerzo guerrero que hacían nuestros ancestros para vivir en el bosque, hoy lo hacemos nosotros para vivir de la agricultura”, destaca.
El dirigente indígena señala que los ingresos por la venta de la cosecha de soja se re-distribuye equitativamente entre todos los miembros de la comunidad. “Gran parte de los fondos se destinan a mejorar los servicios comunitarios, y sobre todo se ayuda a las familias que más necesitan. Incluso tenemos que costear gran parte de la salud, porque en esta zona no hay casi servicios del Estado, si alguien se enferma grave no nos queda más que ir a Ciudad del Este, con todo el costo que significa”, señala Tatugui.

lunes, 7 de febrero de 2011

Un museo en medio de la selva rescata el legado de Bertoni


Finalmente se hará justicia con el gran sabio que desentrañó los secretos de la naturaleza paraguaya. El nuevo Museo Moisés Bertoni se prepara a abrir sus puertas en su antigua casa en la selva, a orillas del río Paraná.


Por Andrés Colmán Gutiérrez
PUERTO BERTONI

En medio de la soledad de la selva, a 36 kilómetros al Sur de Ciudad del Este, con música de fondo formada por el canto de las aves y el rumor de las aguas del Paraná, el museólogo Luis Lataza y sus asistentes trabajan febrilmente reconstruyendo una leyenda.
Sentado en una maciza silla de madera, junto a un antiguo escritorio, rodeado de rodillos de imprenta, papeles manuscritos amarillentos, discos de acetato para gramófono, periódicos anarquistas fechados en 1882, probetas de laboratorio… un hombre anciano de espesa barba y traje gris observa a través de la ventana el paisaje del remanso del río en medio del follaje.
La presunta figura humana es apenas un maniquí de material sintético aún inacabado, pero recrea con mucha fidelidad al sabio suizo Moisés Santiago Bertoni, tal y como se habrá sentido en su estudio reconstruido con los mismos muebles originales, en la segunda planta de la pintoresca casa de madera que erigió en 1895, en este paraje inhóspito de los montes del Alto Paraná, cuando decidió que este iba a ser su lugar en el mundo: la colonia Guillermo Tell, hoy conocida como Puerto Bertoni.
Ciento dieciséis años después, la antigua residencia de los Bertoni, que a la vez fue imprenta, laboratorio, biblioteca y observatorio, emerge de largos años de soledad y olvido para convertirse en uno de los Museos más modernos y de mayor importancia científica en el Paraguay.
Junto al territorio que le rodea, un verdadero jardín del edén de 199 hectáreas, declarado Monumento Natural y área protegida, apuntan a convertirse en uno de los destinos turísticos más atractivos para la región, que empezará a recibir visitantes de todas partes del mundo desde junio próximo.

ANTIGUO SUEÑO. “El Museo Moisés Bertoni es un antiguo sueño que finalmente se concreta”, admite con inocultable satisfacción la ministra de Turismo, Liz Cramer, mientras inspecciona los notables avances que se han logrado en los últimos meses para rescatar el legado del gran hombre de ciencia.
En las diez salas del Museo se exponen objetos personales, manuscritos, cartas, parte de la biblioteca original de 7.000 volúmenes, y una reconstrucción del laboratorio y de la gráfica “Ex-silvis” (desde la selva), la primera imprenta científica en Paraguay, donde el mismo Bertoni editaba con ayuda de sus hijos sus numerosos libros.
“En la planta baja se halla concentrado el legado científico de Bertoni, mientras en la planta alta se accede a su historia de vida” explica Luis Lataza, historiador de Arte y máster en Museología, quien también tuvo a su cargo tareas de refacciones en la Casa de la Independencia y otros museos del país.
“Hemos reconstruido en su mayor parte este sitio, tal y como fue en esos años en que el sabio Bertoni realizó las más importantes investigaciones y descubrimientos científicos. Están muchos de sus trabajos originales, incluyendo libros que él escribió y editó personalmente con su imprenta Ex-silvis (desde la selva)”, relata Lataza.
El rescate del legado de Bertoni se realizó con rubros del Fondo Estructural de Convergencia del Mercosur (Focem), en una tarea conjunta de la Secretaria del Medio Ambiente (Seam) que administra el área protegida, la Secretaría Nacional de Cultura (SNC), encargada del Patrimonio Cultural, y la Secretaría Nacional de Turismo (Senatur).
Dentro del parque habita una comunidad indígena Mby’a Guaraní, descendientes de los mismo indígenas que colaboraron con el sabio Bertoni en sus investigaciones, y que diariamente ofrecen sus danzas típicas a los turistas que llegan en barcos desde Brasil y Argentina por el río para visitar el lugar, aunque aún no puedan acceder al museo.
“Aún estamos estudiando entre las instituciones cual será el modelo de gestión más conveniente, pero no hay dudas de que la recuperación de Puerto Bertoni será el destino internacional más requerido, que dinamizará al turismo en la región, además de su gran aporte educativo y científico”, destaca la ministra Liz Cramer.

SUEÑOS DESDE LA SELVA. La maqueta muestra una aldea utópica: casas y chacras ubicadas en círculos, en terrenos comunitarios y espacios compartidos.
Es la representación gráfica del sueño de una sociedad igualitaria que dibujó el sabio suizo Moisés S. Bertoni y que hoy se rescata entre las muchas piezas que se exhiben en el nuevo Museo en que se transformó su antigua residencia, en las selvas del Alto Paraná.
Nacido en Lottigna, Suiza, el 15 de junio de 1857, Mosè Giacomo Bertoni, luego más conocido como Moisés Santiago Bertoni, fue uno de los científicos inmigrantes más extraordinarios que hayan llegado al Paraguay.
Tras concluir sus estudios de derecho y ciencias naturales en Ginebra, y casarse en 1876 con Eugenia Rosetti, se apasiona por las ideas anarquistas de la época y embarca con su familia hacia Sudamérica en 1884, buscando un lugar en donde poner en práctica sus ideales de una sociedad basada en la agricultura y la investigación científica.
Tras años de primeros experimentos en Argentina, en la provincia de Misiones, Bertoni viaja al Paraguay y descubre el lugar del que se enamora perdidamente: un vergel de selva a orillas del río Paraná, a 36 kilómetros al Sur de lo que es hoy Ciudad del Este.
Llamada primeramente Colonia Guillermo Tell, luego Puerto Bertoni, la propiedad inicialmente de 12.500 hectáreas se convirtió en el centro de una descomunal labor investigadora y científica que desentrañó muchos de los misterios de la cultura guaraní y la naturaleza en el Paraguay.
Allí, acompañado de su esposa y sus muchos hijos, investigó y trabajó exhaustivamente en diversos campos: ciencia físico naturales, antropología, ensayo lingüístico e ideológico, observaciones filosóficas y comentarios históricos, en su mayor parte desde la aislada residencia en Puerto Bertoni, donde tenía montados su laboratorio y su propia imprenta, “en el seno de la naturaleza, que es mi religión y mi vida”, según describió.
En 1896 fundó la Escuela Nacional de Agricultura y en 1914 ocupó la Dirección de Agricultura (actualmente sería el Ministerio. Es recordado principalmente por haber descubierto la Stevia (Ka’a He’e) y por confeccionar el famoso ‘Calendario Bertoni’ que predecía las lluvias y sus efectos en la agricultura con mucha precisión. Falleció el 19 de setiembre de 1929, a la edad de 72 años, en Foz de Yguazú, Brasil, víctima del paludismo.

domingo, 21 de noviembre de 2010

Turismo de aventura en los Saltos del Monday: “Sensación de flotar en el aire”

Dejanira, de 11 años, desciende por la ladera del Monday, casu pegada a la cascada.

Descender con cuerdas más de 40 metros de altura, por la ladera de los imponentes Saltos del Monday, casi pegado a la cascada, es la nueva opción del turismo de aventura en el Alto Paraná. Ultima Hora acompañó la experiencia.

Por Andrés Colmán Gutiérrez
PRESIDENTE FRANCO

“¡Es como volar o flotar en el aire, es una sensación increíble…!”, describe Dejanira Guerín, una niña de 11 años de edad, que en el mediodía de este sábado 20 de noviembre vivió su primera experiencia de descender con cuerdas (rapel) los más de 40 metros de ladera de los Saltos del Monday, en la Reserva Natural Privada Maharishi, distrito de Presidente Franco, como parte de una iniciativa que busca promover el turismo de naturaleza y de aventura.
El periodista de Última Hora acompañó al primer entusiasta grupo de ‘rapeleros’, conformado por Carlos, Francisca, y la pequeña Dejanira, mientras más personas iban llegando para aguardar su turno, en una jornada que se inició a la mañana, en la entrada del Parque Municipal de los Salto Monday, donde el promotor turístico Marcelo Lovera, de la empresa Tembiasá, Deportes y turismo de aventura, se encargó de recibirnos, para luego guiarnos en una larga caminata por las orillas del Monday, aguas arriba de los saltos.
En un hermoso paraje, a orillas del río, nos aguardaba Nicolás Garcete, cuidador de la reserva Maharishi, quien nos hizo cruzar el Monday en canoa hasta la propiedad de 450 hectáreas, que conserva uno de los últimos importantes remanentes de Bosque Atlántico virgen que aún queda en la región.
Una caminata de casi un kilómetros a través del sendero Mbyju’i itá keravo (“en busca del vencejo de cascadas”, denominado así en homenaje a un bello ave en peligro de extinción, que anida en el lugar), hasta llegar a la margen derecha de los Saltos del Monday, donde el instructor Juan González Stanley aguardaba con todo el sistema de cuerdas de seguridad ya instalado, y los equipos necesarios para la práctica del denominado “deporte extremo”.

UN PARAISO POR DESCUBRIR. Desde los miradores naturales de la reserva Maharishi (al otro lado del Parque Municipal) se observan las mejores vistas de los Saltos del Monday, tanto desde los alcantilados de altura, como desde la misma base de las cascadas.
“La Fundación Maharishi, con sede en Holanda, está desarrollando una experiencia de turismo naturaleza y turismo de aventura, a través de la empresa paraguaya Tembiasá, para que las personas puedan venir a vivir una experiencia increíble, como esta de descender con rapel por la ladera del Monday, para poder conocer, disfrutar y comprometerse con la protección de nuestros bellos lugares naturales”, explica Juan González Stanley, experto en turismo y representante en Paraguay de la Fundación.
Tras una breve charla técnica y didáctica de en qué consiste el rapel (del francés rappel, sistema de descenso por cuerdas), viene la colocación de los equipos: un arnés de cintura al que se sujetan cuerdas unida a mosquetones con seguro, un casco y guantes. Y luego acercarse con cuidado hasta la orilla desde donde las aguas se precipitan al vacío con la fuerza de un huracán. Empieza la emoción máxima.

SALTO AL VACÍO. Estar parado en lo alto del acantilado, en la cumbre de los Saltos, provoca una confusa sensación de vértigo y poder. Luego poner los pies, tensar la cuerda y dejar caer el cuerpo en un armonioso salto al vacío. Si, es la sensación de “volar o flotar en el aire”, como lo describe Dejanira, pero casi cayendo junto al poderoso torrente de agua, en medio de un remolino de vapor y un ruino atronador.
El descenso dura alrededor de diez minutos, según la velocidad que se le imprima. Hay momentos en que el pie toca la pared, pero a mitad de trayecto ya es solo dejarse caer suavemente, hasta tocar la base de las cascadas.
Una experiencia única, que no se puede describir con palabras. Hay que vivirla.

LA AVENTURA ESPERA.“Estos programas lo realizamos a cada cierto tiempo, para un nímino de 8 personas y máximo de 25. Si hay personas interesadas en hacerlo en otras fechas, les organizamos un tour según sus necesidades”, explica Marcelo Lovera, directivo de Tembiasá, la misma empresa que realiza raids y carreras de aventuras en varias regiones del país.
La experiencia que insume gran parte del día, cuesta 130 mil guaraníes por persona, e incluye los equipos de rapel, el ingreso a la Reserva Maharishi y chaleco salvavidas para el cruce en canoa por el Monday.
Más datos se pueden solicitar a los teléfonos: 0981 739741 y 0983 618802.

lunes, 8 de noviembre de 2010

La quimera del titanio en Alto Paraná

César Antonio Gimenez, uno de los jóvenes excavadores en busca del titanio.

Pobladores de Minga Porá reciben entre incrédulos y esperanzados la noticia de poseer posiblemente el mayor yacimiento de titanio en el mundo. Desde hace un año, técnicos peruanos cavaron “más de mil pozos”, pero nadie sabía para qué.


Por Andrés Colmán Gutiérrez
y Wilson Ferreira
MINGA PORÁ, ALTO PARANÁ

Minga Porá, una pequeña y laboriosa localidad rural de 13.000 habitantes, a 95 kilómetros al norte de Ciudad del Este, amaneció el viernes 5 de noviembre sobresaltada por la noticia aparecida en la portada de los principales diarios del país, de que en esa región se encuentra un enorme yacimiento de titanio, probablemente el más grande del mundo.
El anuncio del hallazgo del valioso mineral, realizado en Hong Kong por el célebre geólogo y empresario norteamericano David Lowell, ayudó a despejar el misterio instalado en la zona, desde que en junio de 2009 llegara “un grupo de ingenieros peruanos”, quienes contrataron a varios jóvenes lugareños para realizar excavaciones de pozos por todos los alrededores, aunque nunca explicaron con claridad qué es lo que estaban buscando.
“Por fin podemos saber detrás de qué lo que andaban estos ingenieros. Acá ya se dijo de todo, desde que estaban buscando oro, hasta que iban a llevar agua con propiedades medicinales para curar el sida. Pero la verdad es que le dieron trabajo a muchos jóvenes, pagaban 60.000 guaraníes por cada metro que se llegaban a cavar”, relata Venancio González, artesano tallador de madera, mientras guía a los enviados de Última Hora hasta el lugar donde estableció uno de los campamentos de Metálicos y no Metálicos del Paraguay SRL, nombre con el que se inscribió localmente la empresa peruano-canadiense SIC Resources, presidida por Lowell.

POZOS Y MÁS POZOS. “Yo no sé qué lo que es el titanio, pero ojalá que esto que hemos ayudado a encontrar sirva para traer progreso, y que nos saque de la pobreza, porque en esta zona existe mucha necesidad”, dice Juan Andrés Giménez, don Toti, un agricultor de Lote 8, San Miguel, a unos 6 kilómetros del centro urbano de Minga Porá, quien se convirtió en el principal colaborador de los técnicos que llegaron hace más de un año a pedirle ayuda para contratar excavadores.
“Ellos buscaban alguien que conozca la zona, y yo les ayudé. Aquí mismo armaron su campamento, bajo carpas, frente a mi casa. Me dijeron que estaban buscando minerales, pero nunca me dijeron que era titanio. Trajeron un permiso firmado por el propio ministro de Obras Públicas, Efraín Alegre. Yo les conseguí personal, mi propio hijo trabajó con ellos”, relata don Toti.
El hombre levanta una carpa y muestra centenares de bolsas de tierra que se extrajeron durante las excavaciones, y que llevan inscripciones de clasificación. “Aquí contrataron como a una veintena de trabajadores, seguramente cavaron más de mil pozos, iban por todas partes en varias camionetas y mandaban cavar, sacaban la tierra y analizaban con una máquinas especiales que traían, en que se veía con lente de aumento hasta el hilo más fino. Después ponían las muestras en bolsitas y llevaban”, cuenta el poblador.
Don Toti nos muestra una polvorienta fotocopia de la Resolución 643 del MOPC, “por la cual se otorga permiso de prospección o cateo de minerales metálicos y no metálicos a la empresa Metálicos y No Metálicos del Paraguay SRL, en una superficie aproximada de 30.000 hectáreas ubicada en el Departamento del Alto Paraná”.

LEVANTARON CAMPAMENTO. Actualmente no permanece ningún representante de la empresa en la región. “Hace 15 días le pagaron a todo su personal y levantaron campamento, aunque dejaron las bolsas de tierra y algunos de sus equipos en mi casa. Dijeron que regresarían recién en enero. No sabíamos que habían encontrado algo de valor, ahora nos enteramos que había sido estamos encima del yacimiento de titanio más grande del mundo. Ojalá esto ayude a levantar esta zona, que es muy pobre y olvidada por las autoridades”, dice don Toti, mientras acaricia las bolsas de tierra almacenadas en su patio, como si súbitamente éstas se hubiesen convertido en oro.

ESPERANZA. “Es una buena noticia que nos alegra mucho, porque trae esperanza de desarrollo a esta aislada región”, celebra el intendente de Minga Porá, Pedro Ojeda.
El jefe comunal reconoce que el anuncio del hallazgo del gran yacimiento de titanio en la región también le tomó de sorpresa, como a la mayoría de los pobladores, pues si bien sabía que “técnicos de una empresa peruana” estaban realizando excavaciones en la zona, en busca de minerales, no se había informado de ningún descubrimiento.
“Si, yo tenía contacto con esa gente, estuvieron varias veces con nosotros, pero no conocía los detalles. Ellos se movilizaban mucho por toda la región, haciendo excavaciones de aquí para allá. Esperemos que esta noticia traiga bonanza y prosperidad a nuestra comunidad. Vamos a estar acompañando, para ver en qué podemos intervenir y ayuda”, dijo el intendente en una conversación telefónica, ya que debido al fallecimiento de un familiar tuvo que ausentarse de la ciudad.
Minga Porá, antiguamente conocida como Colonia Malvina, es la última localidad al norte de Alto Paraná, sobre la ruta a Salto del Guairá, más conocida como “Supercarretera de Itaipú”, ya cerca de la frontera con Canindeyú. De sus 13.000 habitantes solo 1.000 viven en el casco urbano, y un importante número está conformado por migrantes de origen brasileño. La principal actividad económica es la agricultura, principalmente soja, maíz, trigo y algodón.

PALA AL HOMBRO. César Antonio Giménez tiene solo 16 años de edad, pero se siente orgulloso de ser uno de los excavadores que ayudaron a encontrar el yacimiento de titanio posiblemente más grande del mundo, en la zona de Minga Porá.
“Cuando supe que estaban buscando trabajadores para cavar pozos me presenté y me contrataron. Los que nos dirigían eran unos ingenieros peruanos, muy serios, muy correctos en el trabajo. Nos dieron todos los equipos necesarios, casco, uniformes, guantes, cinturones, palas largas. Nos llevaban en camioneta por todas partes a cavar. Nunca hice tantos pozos en mi vida”, relata.
Les mandaban excavar pozos de unos 60 centímetros de diámetro, de entre 4 a 10 metros de profundidad, hasta encontrar el tipo de suelo que estaban buscando, tomaban muestras y analizaban con equipos especializados, y luego clasificaban las mismas en bolsas de plástico.
“Nos pagaban 60.000 guaraníes por cada metro excavado, y además nos daban aguinaldo, vacaciones y seguro en el IPS. Yo estoy muy agradecido por la manera correcta en que nos tratan. Ojalá vuelvan pronto y sigan dando trabajo a los jóvenes, porque aparte de esta empresa, aquí nadie vino a ofrecernos nada”, afirma César Antonio.

lunes, 13 de septiembre de 2010

Un candidato kelembu aporta humor a la política en el Este



Por Andrés Colmán Gutiérrez
CIUDAD DEL ESTE

Los pintorescos carteles aparecieron en las principales calles de Ciudad del Este. Un hombre descalzo, de aspecto popular, camisa y pantalones arremangados, sombrero pirí, sonriendo con un gesto pícaro, junto a la leyenda: “Kelembu intendente CDE”.
Muchos creyeron que se trataba de una broma, de una promoción comercial o de algún espectáculo cómico. Pero al ver al mismo hombre de la foto repartiendo volantes en la vía pública, entendieron que era, en todo caso, un candidato peculiar en el escenario de la política esteña.
“¿Mba’eteko? Soy Kelembu, candidato a intendente de Ciudad del Este. No prometo milagros. Es más, no tengo experiencia de cómo administrar una Municipalidad, pero prometo escuchar tu reclamo, no esconderme de vos, no jugar ni aprovecharme de tu necesidad, administrar bien tu dinero con transparencia y reinvertirlo en lo que más necesitás y todos necesitamos”, pregona Celso Miranda, en su acción proselitista “cara a cara”.
Casi nadie le llama por su verdadero nombre. “El apodo Kelembu me lo puso la gente en la campaña anterior, cuando me veían recorrer los barrios en un carrito tirado a caballos, tipo karumbé. ‘¡Koa la ñane candidato kelembú hina!’, me gritaban. Ahora ya todos me identifican así, y la gente vibra, los niños hacen fiesta cuando me ven en los barrios”, destaca.
Kelembu se traduce del guaraní popular como “algo poco serio”, pero Miranda asegura que para él no es un apodo despectivo, y lo lleva con orgullo “porque representa al pueblo, a la gente trabajadora y sencilla, a esa mayoría a la que los políticos solo tienen en cuenta a la hora de pedirle su voto y después se olvidan. Yo no voy a olvidar, porque soy un kelembu, como la mayoría”.

ORIGEN HUMILDE. Miranda nació en CDE, en el seno de una familia muy pobre. “A temprana edad quedé huérfano de padre y tuve que salir a trabajar como lustrabotas, canillita, chipero, limpia coches, y ambulante vendiendo linternitas, yo-yo luminoso, la pomadita china conocida como ‘levanta pau’, camisiña musical y finalmente me hice mesitero, para mantener a mi mamá viuda y mis hermanitos”, cuenta el candidato, con su peculiar lenguaje popular fronterizo.
Se convirtió en empresario y hoy es dueño de una de los locales más conocidos en el ramo de la venta y representación de productos de informática. “Que hoy me vaya bien no significa olvidarme de la gente que necesita, por eso quiero ser intendente, para darles mejores oportunidades a mis conciudadanos más humildes”, alega.
Kelembu es Colorado, pero dice estar desencantado de los dirigentes de su partido, por eso creó un movimiento ciudadano independiente, denominado Oportunidad para Todos (OPT). Tiene una larga experiencia como dirigente vecinal en su barrio, Emiliano R. Fernandez, uno de los más populosos y humildes de CDE. “Estoy acostumbrado a trabajar con la gente, codo a codo, para solucionar problemas cotidianos como la falta de agua, el empedrado de una calle o la construcción de una plaza. No se necesita ser un gran doctor para conocer lo que el pueblo necesita”, destaca, aunque asegura que si llega a la intendencia recibirá y dará curso a todas las propuestas técnicas que sean socialmente viables.
Aunque muchos ven su candidatura más bien como una opción testimonial y pintoresca, que le aporta humor a la política esteña, Kelembú cree que tiene chances de ganar. “Cuando empezamos, las encuestas nos daban menos de un 2% de intención de votos, ahora ya tenemos cerca de 16%, y creo que seguimos creciendo, con una campaña que se hace a pulso, en la calle, puerta por puerta. La gente necesita una opción distinta”, asegura.

lunes, 6 de septiembre de 2010

49 jóvenes paraguayos estudian para integrar a América Latina



Llegados a la Triple Frontera desde diferentes sitios del Paraguay, integran junto a brasileños, argentinos y uruguayos el primer grupo de alumnos de la Universidad creada por Lula para formar a los futuros líderes de América Latina.

Por Andrés Colmán Gutiérrez
FOZ DE YGUAZÚ, BRASIL

Llevan apenas veinte días conviviendo juntos y aseguran que ya extrañan “un montón” la sopa paraguaya y el cálido abrazo de mamá, pero no se arrepienten de haber dejado todo para venir aquí a estudiar. Saben que están protagonizando un hecho histórico: ser los “conejillos de india” de la Universidad Federal de Integración Latinoamericana (Unila), creada e inaugurada esta semana por el presidente brasileño Luis Inácio Lula da Silva para formar a los futuros líderes del continente.
Es viernes a la noche y el enviado de Última Hora ha logrado juntar a 21 de los 49 jóvenes estudiantes paraguayos en el comedor del Hotel Salvatin Campestre, en las afueras de Foz de Yguazú, donde se hospeda la mayoría de los 230 estudiantes de Brasil, Paraguay, Argentina y Uruguay, que hasta ahora forman la primera camada de la Unila, o la “turma histórica (grupo histórico)” como ellos lo llaman, en una rápida apropiación del portugués fronterizo.
“A esta hora varios compañeros están dando clases todavía y otros están viajando al Paraguay, aprovechando el fin de semana para visitar a la familia. Dentro de poco ya no vamos a poder hacerlo, porque cada vez tenemos más actividades académicas”, dice Natalia Portillo Mereles, 19, de Villa Elisa, alumna de la carrera Relaciones Internacionales e Integración, quien gentilmente ayudó a convocar a sus compañeros para lograr la entrevista.
El lugar es un típico albergue juvenil, con mucho espacio verde y barracas tipo cabaña, poblado de risas y algarabía juvenil. En la sala de recepción, varios jóvenes revisan su mails y conversan en una mezcla de idiomas y acentos distintos: portugués, español en su diversas variantes mercosurianas y el infaltable guaraní.

HISTORIA. “Soy el primero que llegó aquí y tuve que abandonar el primer curso de Historia en la Universidad Nacional del Este (Une) porque ya no podía pagar los gastos. En Paraguay la universidad es excluyente para los pobres, y la Nacional que supuestamente es gratuita, sale más caro que una privada. Cuando me enteré de este proyecto, me inscribí, fui seleccionado y aquí estoy”, cuenta Rafael Portillo, 28, de Presidente Franco.
Nadia Ruiz, 23, de San Lorenzo, en cambio se enteró por el Facebook, la red social en internet. “Fue todo muy rápido. Presenté mi carpeta y a los dos días ya me avisaron de que fui seleccionada, en una semana ya estaba viajando a Foz. La experiencia es increíble. Esta es una Universidad totalmente distinta. Aquí no hay Medicina, no hay Derecho, son carreras totalmente innovadoras, que apuntan a lo que nuestros países requieren de cara a la integración y el desarrollo, de cara al futuro”, cuenta la joven.
“Cuando llegamos aquí no teníamos plena conciencia de lo que estábamos viviendo, pero hoy vemos que somos protagonistas de un acontecimiento histórico. Vamos a ser los primeros egresados de una Universidad totalmente nueva, que trasciende las fronteras, y que apunta a formar técnicos y dirigentes para hacer posible el sueño de Bolívar y de tantos próceres: construir la unidad latinoamericana”, dice Natalia Portillo Mereles.
Las carreras iniciales habilitadas por la Unila son seis: Ciencias Biológicas, Ciencias Económicas, Ciencias Políticas y Sociología, Ingeniería de Energías Renovables, Ingeniería civil de Infraestructuras
Relaciones internacionales e Integración. Las aulas se dictan en el Parque Tecnológico de Itaipú (PTI), en el lado brasileño de la propiedad de la usina binacional, pero próximamente se iniciará la construcción del campus propio, en un predio de 38 hectáreas, en base a un proyecto diseñado por el célebre arquitecto brasileño Oscar Niemayer.

ABRAZO DE CULTURAS. “De solo estar aquí, ya se nos abre la mente. Estamos descubriendo las riquezas de nuestra identidad cultural, y las de nuestros pueblos hermanos. Con quienes más nos damos es con los uruguayos, que están aprendiendo a hablar guaraní y a tomar tereré”, dice Santiago Zaracho, 23, de Luque.
“Los paraguayos mismos muy diversos. Aquí hay gente del campo, de la ciudad, de la frontera, con culturas muy distintas, pero nos sentimos muy unidos, no hubo hasta ahora una sola pelea o discusión fuerte entre nosotros. Y estando aquí, sentimos que amamos mucho más a nuestro país y no le queremos fallar. Queremos hacer algo grande por el Paraguay”, destaca Larissa Patiño, 18, de Quiindy, alumna de Ingeniería de Recursos Renovables.
Es imposible capturar tantas animadas palabras en tan pocas líneas, pero al menos es justo nombrar a los 21 jóvenes compatriotas que compartieron una noche de sueños e ideales, de proyectos personales y colectivos: Rafael Portillo, Fredy José Bordón, Cristian Ariel Flecha, Nadia Ruiz, Eduardo Carrillo, Pablo Orué, Carlos Giménez, Natalia Portillo Mereles, Santiago Zaracho, Larissa Sosa, Bruno Sosa, Daniel Valdez, Larissa Patiño, Maura Turró, Pamela Vázquez, Camila Flores,
Marco Domínguez, Yesica Honorato, Joel Pereira, Kadia Peralta y Eusebia Zorrilla.
Allí están todos, sonrientes y abrazados para la foto, envueltos en una ajada bandera tricolor que los acompaña a todos lados, y hoy tiene para ellos un significado distinto: son la semilla de un Paraguay que quiere crecer integrado a sus países hermanos.

FALTA APOYO. “Mientras a nuestros compañeros brasileños, uruguayos y argentinos su Gobierno les paga el pasaje y les asesora en todo para obtener sus documentaciones en regla, nosotros nos sentimos un poco abandonados por nuestras autoridades paraguayas”, relata Nadia Ruiz, alumna de Relaciones Internacionales.
Nadia fue la elegida por sus demás compañeros paraguayos para hablar durante el acto inaugural del pasado jueves, en presencia del presidente Lula da Silva, junto a otras tres representantes de los demás países, y fue abrazada y felicitada por el mandatario brasileño por su emotivo discurso. “El ministro brasileño de educación, Fernando Haddad, vino a conversar largamente con nosotros en el salón VIP, antes del acto, a preguntarnos qué necesitábamos. Cuando supo que yo era paraguaya, me dijo: allí está el ministro de educación de tu país, Luis Alberto Riart, le voy a llamar para que hable contigo. Riart vino, me dijo ‘Hola que tal’ y se fue otra vez, muy seco y cortante, sin mostrar ningún interés por como estábamos”, reclama Nadia.
Los estudiantes se encontraron con varias dificultades para actualizar sus documentos de permanencia en Brasil, y tuvieron que recurrir al Cónsul paraguayo en Foz, Eligio Benítez, quien se mostró extrañado de que las autoridades del Ministerio de Educación no le habían avisado que ellos ya estaban llegando a la ciudad brasileña, y que podían requerir asistencia y asesoramiento.
“El cónsul prometió ayudarnos a realizar nuestras gestiones, pero duele un poco sentir a nuestro Gobierno tan ausente, mientras los de otros países están muy presentes. Eso es algo que tenemos que cambiar, si de veras queremos la integración”, sostiene Nadia.
Hasta ahora, el Paraguay es el único de los cuatro países participantes de la Unila que no ha enviado profesores para impartir enseñanzas, aunque está previsto que se sumen desde el año próximo.

domingo, 29 de agosto de 2010

Flores, Piazzola y Jobim educan con música en la Triple Frontera



La letra con música entra. Es el lema de tres jóvenes artistas que recorren colegios y escuelas del Este, ofreciendo entretenidos conciertos didácticos de guaranias y polcas, tango y bossa nova. Disfrutar, jugar, reír, cantar y aprender.

Por Andrés Colmán Gutiérrez
CIUDAD DE ESTE

Romy Martínez regresó a su querida Ciudad del Este tras cinco años de estudios en Florianópolis, Brasil, trayendo consigo su flamante título de Licenciatura en Música. “Sabía que en el Paraguay no iba a hallar muchas oportunidades para aplicar lo que aprendí, pero quería estar aquí, tratar de contribuir”, confiesa.
Ella ya estaba un poco desilusionada, cuando otro colega, Juan Ramón Vera, director de la Escuela de Música Breakthoven de CDE, quien cursa el tercer año de dirección orquestal y composición en la Universidad Católica de Buenos Aires, la invitó a un desafío: “¿Te animás a recorrer escuelas y barrios del Alto Paraná, en una serie de conciertos didácticos para enseñar música de las Tres Fronteras a los niños y a los jóvenes?”.
Romy quedó encantada con la idea. Se sumó la joven violinista Isabel Ramírez, también docente de música de Breakthoven, y se armó el trío. La Cooperativa de Médicos Comecipar aceptó financiarles el proyecto, y en poco tiempo se largaron.
Ahora es un día miércoles, seco y brumoso. Una multitud de chicos y chicas con uniformes llenan de impacientes risas el patio del Colegio y la Escuela San Blas, la histórica Escuela Guazú de CDE. En un improvisado escenario arriba de las escaleras, los tres músicos afinan la guitarra y el violín, prueban el sonido. El espectáculo está por comenzar.

FLORES ES COMO ROQUEGOL. “¿Ustedes le conocen a José Asunción Flores?”, pregunta Juan Ramón. Entre el coro de voces infantiles y adolescentes se escucha algunos tímidos “sí” entre muchos “¡nooo…!”. El músico retruca: “¿Y a Roque Santacruz?”. Esta vez el “¡siii…!” es unánime.
“Bueno, pues déjenme contarle que José Asunción Flores es como Roquegol, pero no el fútbol, sino en la música paraguaya. Es el creador de la guarania, es lo máximo. En la época en que vivió, el Gobierno le echó del país por sus ideas. Es como si el Tata Martino le eche afuera al mejor jugador para la selección”, explica el artista, mientras los instrumentos van sacando los acordes de Ka’aty, de Flores y Fontao Meza.
Entre anécdotas, chistes, conversatorios y juegos didácticos, los tres artistas van introduciendo a los chicos en el universo de “la otra música”. Romy pone la voz cantante, Isabel el violín y Juan Ramón la guitarra y dirección.
A la guarania le sigue el contagiante ritmo de “Garota de Ipanema”, de Tom Jobim y Vinicus de Moraes, que los alumnos identifican en seguida y corean en portugués. Pero el “Adios Nonino” de Astor Piazolla les toma de sorpresa.
“Hemos elegido a tres compositores claves de los tres países cuya influencia compartimos en las Triple Frontera: José Asunción Flores, del Paraguay; Tom Jobim, del Brasil, y Astor Piazolla, de Argentina. Así, a ritmo de guarania, bossa nova y tango, tratamos de mostrarles el rico universo musical y cultural en el que viven, pero que muchas veces no perciben, ante la influencia de la cachaca, el regueton, el funky carioca o la cumbia villera”, explica Romy Martínez.

PROCESO PARTICIPARTIVO. El trabajo de los tres músicos es limitado, por la falta de recursos. “Si no fuera por Coomecipar, no podríamos estar haciendo esto, porque tiene un costo en equipos, en transporte, en movilización. Por suerte, en el reciente Foro Departamental de Cultura encontramos interés de la Secretaría Nacional de Cultura y del Vice Ministerio de la Juventud en respaldarnos, para que esto continúe y se amplíe”, relata Juan Ramón, entusiasmado.
El repertorio incluye temas de otros compositores de los tres países y la recuperación de géneros populares, como los “compuestos”. Tras un colorido anecdotario, que incluye comparaciones con las telenovelas y películas de moda, llega una animada interpretación de la trágica muerte del infiel Mateo Gamarra, en manos de su mujer Delfina Servín, con moraleja incluida.
La participación es tal, que algunos profes y alumnos se suben al escenario a cantar con los artistas. Los chicos reciben unas cartillas donde hay información sobre los temas y los autores, con preguntas didácticas que deben responder al final del concierto.
“La experiencia es muy rica, no solo para los alumnos, sino también para nosotros, los músicos. Creo que así estamos realizando un aporte a la comunidad, asumiendo un compromiso social, ayudando a corocer y a fortalecer la identidad de los chicos en esta región”, destaca Romy Martinez.
El proyecto sigue el próximo miércoles, con otro show didáctico en el Colegio del Área 1 de Ciudad del Este, y un gran concierto abierto a todo el público, el sábado 11 de setiembre, en la Escuela de Música Breakthofen, en las cercanías del Lago de la República (Capitán Brizuela esquina Coronel Oviedo).

AYUDA A ENTENDER. “El trabajo que están realizando estos jóvenes músicos es muy importante para apoyar nuestra labor educativa, porque permite que los jóvenes conozcan más a fondo su identidad y su cultura, y entiendan, por ejemplo, porque estamos celebrando el Bientenario de la Independencia”, destaca la profesora Luisa Fernández, directora del Colegio y la Escuela San Blas, de Ciudad del Este.
“Para quienes ejercemos la docencia en una región como la Triple Frontera, donde hay mucha influencia cultural extranjera, principalmente del Brasil, es muy importante reforzar los elementos de la cultura paraguaya. Estos conciertos enseña de una manera entretenida a conocer y valorar lo nuestro, ubicándolo en un contexto de la cultura de los países vecinos”, dice la educadora.
“Es una experiencia muy divertida y así aprendemos mucho más. Muchos jóvenes no conocen la música de Flores, de Jobim o de Piazolla justamente porque se cree que es algo aburrido, pero en estos conciertos nos enseñan jugando, y descubrimos la gran calidad y valor que tienen estos artistas”, refiere Carmen Báez, 16 años, alumna del Primer Año de la Media en el Colegio San Blas de CDE.
Carmen se entusiasmó tanto con el concierto didáctico que subió al escenario a cantar con los músicos. “Hace 4 años que formo parte de la Embajada Artística de Itaipú, me encanta la música, y al participar de esta experiencia me siento animada para seguir conociendo y estudiando. Creo que hay que llevar estos conciertos a todos los colegios y escuelas, para que todos los jóvenes tengan oportunidad de conocer y aprender”, dice.

martes, 3 de agosto de 2010

Infinito realiza un documental sobre la trata de mujeres en la Triple Frontera


El realizador Esteban Cuevas, de Infinito, entrevistando al periodista de UH, Andrés Colmán Gutiérrez.

Un equipo del canal de documentales de EE.UU. llegó a Ciudad del Este para registrar el incesante tráfico de chicas con fines de explotación sexual. Se estima que 3.500 niños y adolescentes son víctimas del ilícito en la región.

Por Claudia Cardozo
CIUDAD DEL ESTE

Desde el lunes 2 de agosto, un equipo de cuatro realizadores del prestigioso canal televisivo Infinito de los Estados Unidos, especializado en documentales, se encuentra en Ciudad del Este, para realizar una película sobre la trata de chicas jóvenes con fines de explotación sexual.
“Estamos siguiendo la ruta de la trata de personas que se inicia en la Triple Frontera, para una serie de ocho documentales que Infinito empezará a emitir a principios del año próximo. Este tema del tráfico sexual lo estamos grabando en Paraguay, en Argentina, en Brasil y en México”, señala el productor periodístico Esteban Cuevas, al frente del proyecto.
Junto a los realizadores Roberto Espiño, Walter Orol y Cristian Rolón, todos de nacionalidad argentina, permanecerán en el Paraguay durante 4 días, para luego seguir viaje a Tucumán, donde narrarán la historia de Susana Trimarco, una madre cuya hija fue capturada por tratantes y sigue desaparecida.
“Hemos venido a la Triple Frontera porque esta región está considerada internacionalmente como uno de los lugares de mayor captación de chicas jóvenes para ser explotadas sexualmente. Muchas de las víctimas que han sido rescatadas en prostíbulos y burdeles de la Argentina son de nacionalidad paraguaya”, refiere Cuevas.
Los documentalistas estuvieron el lunes en la Redacción Regional de Última Hora, en Ciudad del Este, donde grabaron una larga entrevista con el periodista Andrés Colmán Gutiérrez, cuyo trabajo de investigación sobre el tema, realizado con la colega Sofía Masi, y publicado por este diario, es tomado como referencia para la película.
Posteriormente Colmán los acompañó en un recorrido por la zona costera del río Paraná, mostrándole algunos sitios más utilizados por los traficantes de personas para hacer pasar a chicas jóvenes en canoas hacia la Argentina, burlando los controles fronterizos.

NEGOCIO MILLONARIO. La trata de personas es el tercer negocio criminal más lucrativo, luego del tráfico de drogas y de armas, según la Organización Internacional de Migraciones (OIM).
Un estudio de la Organización Internacional de Trabajo (OIT) estima que 3.500 niños y niñas adolescentes, menores de 18 años, son víctimas de tráfico y explotación sexual en la Triple Frontera entre Paraguay, Brasil y Argentina.
“Queremos realizar un documental realista, al estilo del canal Infinito, que ponga el foco sobre este problema a nivel internacional”, explica Esteban Cuevas.
Además de realizar entrevistas con autoridades involucradas en la lucha contra la trata de personas en la región, el equipo grabará testimonios de las víctimas y realizará una radiografía de cómo operan las mafias dedicadas a esta práctica criminal.
El canal Infinito, actualmente perteneciente a la empresa Time Warner, es el segundo medio televisivo internacional que llega a la triple Frontera para investigar el tráfico de seres humanos con fines de explotación sexual. Hace dos meses, otro equipo, esta vez perteneciente a la Televisión Española (TVE) también realizó un documental de una hora para el programa periodístico “En Portada”, que se estaría emitiendo en los próximos meses.

sábado, 15 de mayo de 2010

Hollywood go Home


Si fuera por la “mala imagen” que el cine puede construir sobre una región, nadie querría visitar Sicilia, retratada en tantas películas como un siniestro lugar de donde surgen los grandes criminales capos mafiosos de la Cosa Nostra, como el legendario Vito Corleone, inmortalizado en la magistral trilogía El Padrino, de Francis Ford Coppola.
Contrariamente, miles de turistas llegan a la bella isla del sur de Italia, atraídos no solo por su belleza paisajística y su patrimonio histórico, sino también por su oscura leyenda cinematográfica. Las agencias ofrecen circuitos como El Tour de la Mafia o El Padrino Mafia Event, que incluyen recorridos por la cárcel Ucciardone, donde enloqueció Michele Greco, o el Grand Hotel des Palmes, que alojó a Lucky Luciano.
Por ello, no deja de ser inaudita y sorprendente la cruzada mediática iniciada por la ministra de Turismo, Liz Cramer, en contra del proyecto de la cineasta norteamericana Kathryn Bingelow de filmar su próxima película en la Triple Frontera entre Paraguay, Brasil y Argentina, por temor a que aumente la “mala imagen” de la región y perjudique a las inversiones turísticas.
Sin conocer el argumento del filme, suena apresurado convocar a un boicot y negar todo apoyo institucional a un emprendimiento que, por estar ligado al gran mercado mundial de la industria audiovisual, puede traer más beneficios que perjuicios al Paraguay, y en especial a esta fascinante región fronteriza de conflictos y maravillas.
Cualquiera que haya visto The Hurt Locker (ganadora de seis Oscar 2010, incluyendo mejor película, mejor guión original y mejor dirección), con su visión cruda y desgarradora de la guerra, y sin duda una hábil y sutil crítica a la política norteamericana en Irak, entenderá que es difícil esperar que Bingelow y su guionista Mark Boal hagan un film burdo, esquemático y convencional.
Pero aún si fuera –como se anuncia- un buen trilher sobre el tráfico de drogas, no hay que olvidar que Triple Fontier será una película de ficción y no un documental periodístico. Además, ¿quiénes somos para decirle a la primera mujer que ganó el Oscar a Mejor Dirección, en toda la historia del cine, cómo tiene que hacer su película?
Para un país como el Paraguay, que tiene una producción cinematográfica todavía en pañales -debido a la total ausencia de apoyo del Estado a sus realizadores-, el único minuto en que Ciudad del Este aparece en la película Miami Vice, de Michael Mann, vale más que todos los cortos promocionales de la Senatur, aún con mafia y contrabando de fondo. Una ministra inteligente, eficaz y sin muchos recursos presupuestarios para el desarrollo del turismo, como lo es Liz Cramer, tendría que entenderlo.

lunes, 19 de abril de 2010

Relato de una víctima de la red de trata Paraguay-España


Estela Santander (de espaldas), relata el calvario sufrido.

Tras padecer un largo calvario, Estela Santander relata cómo la llevaron engañada desde Ciudad del Este a España, para someterla a una red de prostitución. Pese a las denuncias, la mafia de la trata de mujeres sigue operando con total impunidad.

Por Sofía Masi
y Andrés Colmán Gutiérrez

CIUDAD DEL ESTE

¿Cómo se puede regresar desde los abismos del dolor más terrible, y sentir que una está viva para poder contar lo que ha sufrido, más allá de la rabia, la vergüenza, la impunidad, la impotencia, los prejuicios de la gente? Estela Santander confiesa que aún le cuesta creer todo lo que le pasó, desde que le ofrecieron viajar a España para trabajar en el servicio doméstico, pero acabó encerrada en varios burdeles de la ciudad de Alicante, obligada a someterse a la prostitución.
“A veces siento como si lo que me sucedió le hubiera pasado a otra persona. Con ayuda sicológica estoy tratando de volver a armar mi vida, pero sé que ya nunca seré la misma”, admite tras la larga entrevista mantenida con periodistas de Última Hora y Telefuturo, en la que fue relatando minuciosamente el largo calvario que padeció, como víctima de un presunto caso de trata de personas con fines de explotación sexual, que está siendo investigado tanto por las autoridades españolas como por la Fiscalía de Ciudad del Este.
Hace ya varios meses que Estela pudo escapar de su cautiverio y regresar al Paraguay en junio de 2009, pero recién ahora se anima a romper el silencio y a hablar con miembros la prensa. No tiene reparos en que se mencione su nombre, pero no quiere fotografías que la identifiquen. Su testimonio aporta reveladores datos de cómo la red de trata y prostitución sigue operando impunemente a pesar de las denuncias, y lo publicaremos en dos entregas.

EN BUSCA DE TRABAJO. Obligada por las deudas que su familia había contraído ante la enfermedad de su madre, en noviembre de 2008, Estela Maris Santander Yrala, entonces con 40 años de edad, aceptó ir a trabajar a España, dejando un hijo de 10 años en Ciudad del Este.
Según su relato, fue convencida por su ex cuñada, Marta del Socorro Ortíz López, quien le dijo que trabajaría en una casa como empleada doméstica. “Marta fue pareja de mi hermano y está en España desde el año 2006, donde es concubina de un español, Joaquín Morsillo. En diciembre del 2007, ella ya había gestionado que mi hermana menor vaya a trabajar, quien luego regresó”, cuenta Estela.
Entonces Estela no sabía que su hermana menor también había sido víctima de la misma red, de la que finalmente pudo escapar, ya que a su vuelta ella no dijo nada, por miedo o por vergüenza. Recién en España lo supo.
Durante un viaje de Marta del Socorro a Paraguay, esta le propuso ir a España, donde le conseguiría un buen trabajo. “Me dijo que, si no tenía dinero, yo podía contactar con un abogado llamado Crispín Villalba, en Ciudad del Este, quien me ayudaría con las gestiones y el dinero para el pasaje”, refiere.
Así lo hizo. El 22 de noviembre de 2008, según la denunciante, el abogado Crispín Villalba fue a buscar a Estela a su casa, en el barrio Don Bosco de Ciudad del Este, y la llevó a realizar gestiones, para luego trasladarla hasta Península, localidad al sur de Presidente Franco, donde supuestamente una persona debía darles el dinero para el viaje. “A la noche me llevó a una casa donde íbamos a pernoctar. Allí me forzó a tener relaciones sexuales con él, aprovechándose de mi necesidad, diciéndome que solo así me iba a ayudar a viajar”, relata la mujer.

LA DEUDA. El 24 de noviembre de 2008, según Estela, el abogado Crispín Villalba la llevó a la agencia Master, Viajes y Turismo, en el shopping Mirage, microcentro comercial de CDE, donde Crispín abonó 2.100 dólares por el pasaje, como un préstamo que luego había que devolver.
Cuenta que allí le hicieron firmar un pagaré por 24 millones de guaraníes, como garantía en caso de que no devolviera el préstamo en tres meses. “Allí Crispín me dio además 125 dólares de viático, y le dijo al dueño de la agencia, Ramón Jara, de que si necesitaba más dinero para entrar a España, el me entregue sin problemas”, refiere.
Alega que todos los trámites eran monitoreados por su ex cuñada, Marta del Socorro, desde España, quien esa misma tarde le llamó para confirmar la fecha del viaje. También habló por teléfono con el español, Joaquín Morsillo, pareja de Marta, quien le dio un número de celular para contactar con él al llegar a Italia, y poder organizar su entrada a España.

VIAJE AL INFIERNO. El 24 de de noviembre de 2008, temprano, Estela Santander se presentó a la agencia Master, Viajes y Turismo, para recoger su pasaje y ser llevada hasta el Aeropuerto de Foz de Yguazu, Brasil, y encontró que había 43 personas que viajarían con ella en la misma “excursión”.
El pasaje, en el vuelo JJ3558 de TAM era con destino a Roma, Italia (con escala en Milán), y todos debían decir que eran “turistas en visita a El Vaticano”. Lo que la mujer no sabía es que, en lugar de la Ciudad Santa, la estaban llevando en un viaje al infierno.
Al llegar a Roma, fueron hospedados en un Hotel llamado Palacavicci. De allí Estela llamó por teléfono al español Joaquín Morsillo, a quien avisó que iban a llegar a Barcelona, España, todos los “turistas paraguayos” que partieron de Ciudad del Este, en un autobús de turismo especialmente rentado por la agencia turística.
“Viajamos más de 20 horas y no tuvimos inconvenientes en la frontera. Yo llegué a Barcelona y de allí fui en tren hasta Alicante, donde me tenían que esperar Marta y Joaquín. Solo me quedaban 3 euros en el bolsillo. En la Estación de trenes solo apareció el español para buscarme y me llevó en su auto directamente a un club nocturno, que en realidad era un prostíbulo llamado El Castillo, en un lugar conocido como El Rebolledo. Me encontré con la gran sorpresa: Joaquín me dijo que el trabajo que tenía que hacer era vender mi cuerpo, igual que la mayoría de las chicas, en su mayoría rumanas, que estaban en el lugar. Allí sentí que la tierra se abría bajo mis pies”, relata Estela.
“En el camino me fue explicando que no había forma de conseguir otro trabajo y tenía que quedarme en ese club, que iba a ser solo por unos días hasta conseguir algo mejor. Me entregó una bolsa con ropa interior, zapatos, preservativos, crema de lavado vaginal, etc. Me dijo que entre y pregunte por Miguel, que ya estaba todo arreglado. Yo no sabía qué decir, no sabía qué hacer, y le obedecí”, recuerda.

PROPUESTAS DE SEXO. Dentro del club, Miguel, el gerente, la recibió y le preguntó si quería empezar a trabajar esa misma noche. “Se me ocurrió decirle que estaba muy cansada del largo viaje, y si por favor me podía dejar descansar primero. Me llevó a una habitación, donde estaba una chica brasileña. Esa noche, ella me contó cómo era el negocio, que teníamos que estar en el Club desde las 5 de la tarde para atender a los clientes, y que si estos querían sexo les teníamos que llevar a la habitación”, refiere.
Al día siguiente, el gerente le dijo a Estela que ya estaba adeudando 65 euros por el alquiler de la habitación, y que debía empezar a trabajar para poder pagarlo. “Desde esa tarde comencé a atender en el club con las otras chicas, la mayoría eran de nacionalidad rumana, casi todas rubias. No había muchos clientes en esa época, y me salvé de tener que trabajar”, alega.
Al cabo de una semana, su ex cuñada Marta del Socorro la llamó por teléfono, y ella le pidió ayuda para que la saque del lugar. “Me dijo que tenga paciencia, que busque trabajar con buenos clientes para juntar dinero y poder pagar la deuda, porque de otra manera no iba a poder salir de ese sitio”, cuenta.

AMENAZAS. Estela no quiere recordar muchos detalles de lo que era la vida cotidiana en el prostíbulo español. Por momentos da la impresión de que los recuerdos la hieren, pero en otro instante necesita expiarlos. “Nos daban un vale para tomar una copa gratis al empezar, que según las chicas tenía droga. Yo nunca tomé. Allí adentro corría bastante la droga y muchas chicas eran viciadas”, cuenta.
A los 15 días la volvió a llamar Marta y le propuso llevarla a otro club llamado Granada. Dice que vinieron a buscarla con Joaquín, y durante el trayecto ella les pidió que ya no la dejaran trabajar en el local, que quería buscar otro empleo más digno. “Allí el español me amenazó diciéndome que había una mafia detrás de todo eso, y que si yo no trabajaba para pagar la deuda, me iban a liquidar”, narra.
Finalmente la llevaron a otro club llamado Pippo’s, del cual conserva la tarjeta y los vales, ubicado en Carretera Nacional 340, kilómetro 694, de Alicante. Cuenta que allí trabajaba todo el día, y cada cliente debía pagar 50 euros por un promedio de media hora de compañía en la habitación.
“En esa época no había muchos clientes, y no podía juntar el dinero necesario para pagar la deuda que Marta y Joaquín pasaban todas las semanas a cobrar. Entonces Joaquín me propuso vender cocaína dentro del local, pero yo rechacé, me dio mucho miedo”, relata.

AYUDA PARA ESCAPAR. Estela Santander agradece que, en medio de todo el infierno en que fue su vida, ella logró encontrar a personas generosas que la ayudaron a salir del club nocturno donde era explotada.
“Por suerte pude encontrar a unos clientes que se compadecieron de mí situación y me ayudaron con dinero para pagar toda la deuda que tenía en el local, y así poder salir. El 20 de febrero de 2009 pude pagar todo y salir del club, estos buenos amigos españoles me llevaron a un departamento, en Orihuela (Alicante) junto a una señora, donde me pude quedar”, recuerda.
Durante algunos meses, ella trabajó como empleada doméstica con la mujer que la recibió en su casa, mientras Marta del Socorro y su concubino la buscaban afanosamente.
“El 23 de abril de 2009, mientras yo estaban escondida de la pareja en España, el abogado Crispín Villalba se fue hasta la casa de mi mamá en Ciudad del Este, y amenazó que si yo no aparecía a pagar la deuda del pagaré, iba a hacer desaparecer a uno de mis hermanos”, relata.
Finalmente, con el apoyo de organizaciones internacionales que apoyan a víctimas de trata, ella pudo retornar al Paraguay y desde entonces intenta rehacer su vida, pero la sobra de todo lo que sucedió la acecha como una maldición siniestra.
“Hice una denuncia en España y otra en Paraguay, pero sinceramente confío más en la Justicia española que en la de mi país. Aquí la investigación no avanza, la fiscalía nunca tomó en serio mi caso, y las personas que me llevaron siguen trabajando tranquilamente, llevando más mujeres como yo bajo engaño. Lo más terrible es que mi propia hermana menor fue víctima antes que yo, ella pudo escapar y volver, pero nunca dijo nada por vergüenza. En España supe que ella estuvo en la misma habitación del prostíbulo donde estuve yo”, dice Estela Santander.

jueves, 15 de abril de 2010

"No denuncio a la Iglesia, sino a un sacerdote que abusó de mí"


Manos acusadoras. Alcides Guzmán no quiere ser retratado, pero permitió fotos de medio cuerpo durante la entrevista.


Alcides Guzmán, el joven que denunció al sacerdote Mario Sotelo por presunto abuso sexual, accedió a una entrevista con Última Hora. Confiesa que se siente discriminado por su familia y amigos


Por Andrés Colmán Gutiérrez
CIUDAD DEL ESTE

Tiene 18 años de edad, pero da la imagen de ser todavía un niño campesino pequeño, humilde y asustado.
Flaco y de estatura mediana, vestido con un pantalón y una remera sencilla, con una pequeña mochila en las manos, Alcides Guzmán recibe al periodista con la mirada hundida en el piso, en una sala privada de la Secretaria Nacional de la Niñez y de la Adolescencia, oficina regional de Ciudad del Este, pocos minutos antes de prestar declaración ante la fiscala Juliana Giménez, quien investiga la denuncia por presunto abuso sexual que presentó contra el sacerdote Mario Sotelo, ex párroco de Juan León Mallorquín.
Alcides ha viajado desde Asunción, temeroso de que la prensa se entere de su presencia, y su imagen sea retratada en los medios. “No, no quiero que me saquen fotos, por favor. Demasiado estoy sufriendo la burla de algunos que ya me reconocieron”, explica. Hasta ahora, el periodista de ÚH es el único con quien ha aceptado hablar, tras la intermediación de algunos amigos, y con la confianza de que su caso no será explotado de un modo sensacionalista.
A solas en la sala, a Alcides le cuesta abrirse a hablar del abuso que dice haber sufrido, y a ratos da la impresión de que se va a quebrar y echar a llorar.

-¿Podés relatar como sucedió el supuesto abuso que estás denunciando?
-Sí, voy a tratar. Me es difícil hablar del tema. Yo soy de Juan León Mallorquín (Alto Paraná), nacido allí, vengo de una familia humilde. Le conocía al padre Mario Sotelo, que era el párroco, pero desde lejos nomás, hasta que me preparé para hacer mi Primera Comunión y me fui a confesarme con él.

-¿En qué fecha hiciste la Primera Comunión?
-El 26 de noviembre de 2008.

-¿Qué edad tenías vos, entonces?
-Tenía 17 años.

-¿Y qué sucedió en el confesionario?
-El padre me dijo que estaba muy preocupado por mí, porque mirándome a los ojos había visto que yo estaba muy enfermo, que alguien me había puesto una especie de payé (brujería), que me iba a causar mucho mal. Yo le confesé que realmente me sentía mal, y me preocupó lo que me dijo, ya que era un pa’i. El me dijo que me podía ayudar a curarme, y que venga otra vez después junto a él en la parroquia, para ver qué podíamos hacer.

-¿Volviste después junto al sacerdote? ¿Qué pasó, entonces?
-Volví otra vez, varias veces, y él me iba hablando, me iba convenciendo de que yo estaba muy mal. Yo en esa época no sabía muchas cosas y le creí todo lo que me decía, porque él sabía hablar muy bien. Hasta que, al fin, me dijo que la única manera de curarme de la enfermedad que yo tenía era a través de un acto sexual, que por el semen iba a salir, iba a limpiarse todo en ese momento. Y me propuso hacer con él…

-¿Cuántas veces mantuvo relaciones sexuales contigo?
-Fue una sola vez. Después el padre Mario quiso volver a tener, pero yo ya me negué.

-¿En qué fecha ocurrió el acto sexual?
-Fue a fines de diciembre del 2008.

-¿En qué momento creíste haber sido víctima de un abuso, y por eso hiciste la denuncia?
-Como te dije, en ese momento yo le creía todo lo que me dijo, pero por otra parte sentía vergüenza, culpa, por lo que habíamos hecho. Algo me decía que estaba mal, pero no me animaba a contarle a nadie. Recién varios meses después le conté a una persona, y me dijo que yo había sido víctima de un abuso, y que tenía que denunciar. Igual dudé mucho, pero hablando con otras personas fui conociendo mis derechos, por eso hice la denuncia.

-Tu primera denuncia fue ante la Diócesis de Ciudad del Este, presentada el 11 de enero. ¿Qué pasó allí, según tu criterio?
-Primero hablé con los superiores del padre Mario (de la Congregación del Verbo Divino), que me trataron muy bien. Después me llevaron al obispado de Ciudad del Este, donde el obispo (monseñor Rogelio Livieres Plano) me escuchó atentamente, y me hicieron muchas preguntas. Luego fui a otra cita, donde ya estaba el padre Mario Sotelo, que negaba todo lo que yo decía. Al final no pasó nada, decidieron archivar el caso, para mí que le protegen al sacerdote. Por eso decidí hacer la denuncia ante la Justicia, a pesar de que es algo muy difícil para mí.

-¿Por qué decís que es difícil?
-Desde que se empezó a conocer el caso, me siento discriminado por mis familiares y por muchos de mis amigos. Parece que tienen vergüenza de mí. Me tuve que mudar de Mallorquín. Ahora trabajo en un taller mecánico, en Asunción. Algunos me reconocieron desde que mi nombre salió en los diarios y se burlan. Por eso no quiero fotos.

-¿Estás resentido contra la Iglesia Católica por lo que te sucedió?
-No, yo no denuncio a la Iglesia sino a un sacerdote que abusó de mí, aprovechándose a lo mejor de mi inocencia o de mi ignorancia. Pero no tengo nada contra la Iglesia, al contrario, encontré a otros sacerdotes que me apoyan y me acompañan, como el padre Nilo Mármol (titular de la SNNA en Alto Paraná). Yo solo quiero que se haga justicia.

El padre Sotelo guarda silencio

Última Hora intentó obtener la versión del sacerdote Mario Sotelo, pero miembros de la Congregación del Verbo Divino, a la que pertenece, indicaron que por el momento el sacerdote no quiere hacer declaraciones.
Sotelo, quien se desempeñaba como titular de la Parroquia Sagrado Corazón de Jesús, de Juan León Mallorquín, Alto Paraná, fue trasladado a la Diócesis de Encarnación, pero el obispo local, Ignacio Gogorza, anunció que solo será admitido una vez que la Justicia resuelva el caso de presunto abuso sexual por el cual es denunciado, y lo absuelva favorablemente.
Actualmente, según informes, el padre Mario Sotelo se encuentra en la localidad de Edelira, Itapúa, en casa de sus familiares.

viernes, 26 de marzo de 2010

Una heroina en el ojo de la tormenta


Ni lo cimientos quedaron. Beatriz de Duarte, con su nieta Yenny, muestra los escombros de la casa desde donde María Luisa fue arrastrada por el raudal.


María Luisa Duarte se lanzó a las aguas desbordadas del arroyo Saltito, en Ciudad del Este, y rescató heroicamente a su hija y a su sobrino, pero ya no pudo salir. Sigue sin ser encontrada.


Por Andrés Colmán Gutiérrez
CIUDAD DEL ESTE

“El agua llegó de golpe y haciendo mucho ruido, parecía luego el fin del mundo”, recuerda Beatriz de Duarte entre sollozos, todavía impactada por la tragedia, mostrando los escombros de la vivienda de su hijo Manuel, totalmente destruida por la tormenta del martes último, en el barrio Remansito de Ciudad del Este, donde su hija María Luisa fue arrastrada por el raudal y sigue sin ser hallada.
Esa mañana Manuel salió temprano a trabajar y dejó a su pequeño hijo Marcos a cargo de su hermana María Luisa, en la humilde vivienda de madera y ladrillos, a orillas del arroyo, en un estrecho valle ubicado entre dos colinas, en la zona costera del río Paraná. El niño estaba jugando con su primita Yenny, la hijita de María Luisa, mientras la mujer ayudaba en la tareas domésticas en casa de su madre, Beatriz, a muy poca distancia, un poco más arriba del valle.
“La tormenta no nos dio tiempo para hacer casi nada. Se largó a llover muy fuerte, y escuchamos que el raudal venía con gran potencia y el agua del arroyo empezó a crecer muy rápido. Mi hija salió bajo la tormenta para buscar a los niños, pero cuando llegó allí la casa ya estaba toda inundada”, relata Beatriz, en guaraní.
Ella vio cuando su hija se lanzaba al arroyo desbordado y peleaba contra la correntada para entrar dentro de la casa y sacar a los dos niños en brazos, avanzar resbalándose en el agua hasta la cintura, hasta llegar a la costa, donde les pasó a los dos chicos para que se pongan a salvo.
“Cuando ella quiso salir, ya no pudo. El agua le llevó con mucha fuerza. Yo la vi irse sin poder hacer nada, pidiendo auxilio mientras sacaba la cabeza y los brazos, gritándome: ‘¡Socorro mamá… pe che ajudamina! (ayúdenme, por favor)’. Corrimos por la costa hasta donde podíamos, pero ella ya no volvió a salir. ¡Fue muy terrible…”, recuerda Beatriz, destrozada por el dolor.

DESAPARECIDA. María Luisa Duarte tenía 28 años de edad y deja a dos hijos pequeños. Ella vivía separada del padre de sus niños, y ayudaba a su madre y a sus hermanos en diversas tareas de sobrevivencia. “Acá somos muy pobres pero trabajadores, y nos ayudamos entre todos para sobrevivir”, dice Beatriz, quien es viuda y crió sola a sus diez hijos.
Debido a la pobreza, no tuvieron más alternativa que construir sus viviendas en una zona baja, junto al arroyo, pero que se convierte en un territorio de alto peligro cada vez que llueve. “Mi hijo Manuel perdió toda su casa y todas sus pertenencias, se quedó solo con la ropa puesta. El agua le quitó todo, no dejó ni los cimientos de la vivienda. Y yo le perdí a mi hija, que fue una heroína, que dio la vida por salvar a su hija y su sobrino”, dice la sufrida mujer.
Más de un centenar de pobladores viven a orillas del arroyo, todos a merced de los raudales. “A mí ya no me sirve que me traigan chapas y víveres, la mejor ayuda es que me consigan un terreno más alto donde mudarme. Pero ahora lo que más quiero es que encuentren el cuerpo de mi hija y me la devuelvan, para darle una despedida cristiana, como se merece”, pide Beatriz.
Efectivos de la Marina, de la Policía y del Cuerpo de Bomberos realizan búsquedas del cuerpo de la mujer, pero hasta ayer no hubo resultados. Los rescatistas temen que haya sido arrastrada hasta el caudal del río Paraná, donde será mucho más difícil hallarla. Mientras, en el barrio Remansito, dos niños pequeños siguen preguntando: “¿Dónde está mamá…?”.

jueves, 25 de marzo de 2010

El Puente de la Amistad cumple 45 años


Admirado por los turistas, escarnecido por los sacoleiros y viajeros que deben soportar diariamente un verdadero calvario para intentar cruzarlo, retratado mil veces en idílicas postales y hasta filmado en superproducciones de Hollywod, el Puente de la Amistad sobre el río Paraná, en la frontera entre Ciudad del Este (Paraguay) y Foz de Yguazu (Brasil), cumple 45 años de vida este sábado 27 de marzo.
Es considerada una de las obras más bellas entre los puentes de arco, en todo el mundo. Con 552,40 metros de largo; 13,5 metros de ancho y 78 metros de alto, figura en el libro de records mundiales "The Guinness Book of Structures", como el segundo más grande de los puentes de concreto armado y arco, luego del Puente de Gladesville, sobre el río Perramatta, cerca de Sidney, Australia.
Es el principal ícono arquitectónico de Ciudad del Este y toda la región de la Triple Frontera, y su estructura soporta diariamente el paso de unas 25.000 personas y más de 10.000 vehículos, que generalmente congestionan el tráfico y producen largas colas, especialmente cuando los inspectores de la Receita Federal, en la Aduana brasileña, se ponen estrictos en los controles de las mercaderías ingresadas desde el lado paraguayo, o de los grandes camiones cardados de grano, rumbo a los puertos marítimos.

CONTROVERTIDA HISTORIA. La construcción de un puente internacional sobre el río Paraná fue acordada por el entonces general Alfredo Stroessner y el presidente Juscelino Kubischetk, en un paquete de obras que incluían la represa hidroeléctrica de Itaipú, en el marco de la llamada “marcha hacia el Este”, que abrió camino entre la selva alto paranaense para crear nuevas poblaciones, con generosas facilidades para la instalación de colonias de migrantes brasileños en territorio paraguayo.
El 29 de Mayo de 1956, en Rio de Janeiro, se firmó el convenio para construir el puente. Una comisión especial llevó adelante la obra, proyectada por el ingeniero brasileño Almyr Franca. El 26 de enero de 1961, Stroessner y Kubistchek realizaron una primera inauguración simbólica de la unión física, que aun no estaba terminada, pero se podía cruzar por encima de tablones colocados en la parte superior.
Las obras concluyeron el 26 de marzo de 1962 y tres años después, el 27 de marzo de 1965, se procedió a la inauguración oficial. En Brasil ya gobernaba otro presidente, Humberto Castelo Branco, quien daba inicio a un largo y funesto periodo de dictadura militar. En Paraguay, continuaba el mismo, el general Alfredo Stroessner.

ABANDONADO. Desde su inauguración oficial, mucha agua ha corrido bajo el Puente de la Amistad. La localidad que la alberga en el lado paraguayo dejó de llamarse Ciudad Presidente Stroesner tras el golpe que puso fin a la dictadura en 1989, para llamarse Ciudad del Este, a secas.
Actualmente el puente muestra una imagen de colapso y abandono, y está en marcha el proyecto de una segunda unión vial en la zona de Presidente Franco, que permitirá darle algún alivio. Aunque continúa sólido y firme, su imagen de decadencia da lástima: le falta una buena mano de pintura y refacción. Las vallas están rotas y el sistema de iluminación nocturna totalmente caído. A la noche exhibe una imagen oscura y siniestra, aunque hay quienes dicen que es de propósito, para facilitar las operaciones de contrabando.
En el 2009, el entonces director paraguayo de Itaipú, Carlos Mateo Balmelli, habló un plan de mantenimiento y recuperación del sistema lumínico, financiado por la entidad binacional. Pero hasta ahora, solo ha quedado en el mero anuncio.

sábado, 13 de marzo de 2010

Triple Frontera de película


El director Michael Mann dialoga con autoridades municipales de Ciudad del Este, durante la filmación de escenas de la película Miami Vice, frente al local del Hotel Casino Acaray.


Hay una decena de películas que incluyen escenas filmadas en la región. Además de la ganadora del Oscar, Kathrin Bingelow, el director de “Tropa de Elite” también quiere filmar una de espías y terrorismo.


Por Andrés Colmán Gutiérrez
CIUDAD DEL ESTE

Desde el mortal agente James Bond 007 hasta el aventurero arqueólogo Indiana Jones ya se pasearon por la región de la Triple Frontera entre Paraguay, Brasil y Argentina, estableciendo las bases de lo que podría llegar a ser, en el futuro, una pequeña Hollywood sudamericana.
Desde que el inquietante director estadounidense Samuel Fuller incluyó escenas en blanco y negro de las Cataratas del Yguazú en su drama sicológico Shock Corridor (Corredor sin retorno) en 1963, más de una decena de cineastas realizaron parte de sus películas en la región.
Grandes realizadores como Steven Spielberg y Michael Mann incluyeron tomas realizadas en las Cataratas (el caso de Indiana Jones y el Reino de la Calavera de Cristal, 2008) así como en la alucinante Ciudad del Este (Miami Vice, 2007), en una larga lista que incluye comedias disparatadas como la de Mr. Magoo (1997) de la Disney, la serie fantástica del monstruo japonés Goodzilla (2007), o la premiada obra de cine independiente Happy Together, del realizador hongkonés Wong Kar-Wai, ganadora en Cannes.
Pero la mayor expectativa se confirma con el anuncio de la gran ganadora de los Oscars 2010 por su film The Hurt Locker (Vivir al límite), Katryn Bigelow, quien ya tiene en desarrollo un film titulado “Triple Frontier”, con guión del también ganador del Oscar, Mark Boal.
CRITICA SOCIAL. En una reciente entrevista con el diario Folha de Sao Paulo, la ganadora del Oscar ofreció más detalles de lo que será Triple Frontier.
“Quiero continuar con esa idea de un film de crítica social, que debe ser entretenimiento y atracción también. Es una excelente oportunidad para colocar una lupa o lente de aumento sobre una situación en particular en esa región (la Triple Frontera), como hicimos con The Hurt Locker en Irák”, destacó.
Kathrin Bingelow dice que su guionista, Mark Boal, aún está escribiendo la historia, pero confía en que la producción de Triple Frontier se inicie este año. “Probablemente las filmaciones se hagan más en el lado argentino, pero el guión todavía se está haciendo, es una etapa muy prematura y no podemos aún hablar mucho sobre esto. Espero que sea para este año, estoy cruzando los dedos”, indicó.

OTRA PELICULA. Mientras, hay otro proyecto en marcha. El director brasileño José Padilha, ganador del Premio Oso de Oro en el Festival de Berlín con su película "Tropa de Elite", sobre la lucha de policías y traficantes en las favelas de Río de Janeiro, adelantó a la revista Variety que ya está en marcha su próxima película, que “transcurrirá en la Triple Frontera”.
Con guión de Jason Keller y producción del sello Warner Bros, el filme girará “en torno a un agente federal norteamericano que viaja de incógnito a la Tripe Fronteira sudamericana, con el objetivo de desmantelar una célula terrorista, reveló Padilha.
"La película atraerá la atención del mundo entero hacia esta 'Dodge City' moderna de América del Suur", dijo también a Variety el productor Gianni Nunnari, el mismo que estuvo tras exitosas películas como 300, Los Infiltrados y Seven.


Las Diez películas con escenas filmadas en la Triple Frontera

Shock Corridor (Corredor sin retorno, 1963). Un clásico drama sicológico, dirigido por Samuel Fuller, en blanco y negro y 19 milímetros, incluía escenas de las Cataratas del Yguazú, tratada con efectos especiales, para ilustrar la alucinación del protagonista.

Moonraker (1979). Undécima película de la serie James Bond 007, dirigida por Lewis Gilbert y protagonizada por Roger Moore, fue la primera gran producción que puso el foco en la región. Siguiendo la pista de un transbordador espacial robado, Bond llega a Brasil y acaba en una lancha arrastrada por la corriente a las fauces de las Cataratas del Yguazú. Se salva a último momento, activando un planeador portátil, que sobrevuela de modo espectacular la Garganta del Diablo, mientras su embarcación es tragada por la aguas.

La Misión (1986). La premiada película de Roland Joffé, con Robert de Niro y Jeremy Irons, abre con una impactante escena: un sacerdote jesuita atado a una cruz por los indios es arrojado a la principal cascada del Yguazú. La imagen del martirio acuático se convirtió en la foto promocional del filme. El equipo filmó durante una semana en Foz de Yguazú y De Niro hizo un recorrido por la región, manifestando su admiración por las bellezas naturales.

Mr. Magoo (1997). La delirante comedia producida por Walt Disney Picture y protagonizada por Leslie Nilsen, quien encarna al clásico personaje de dibujos animados, quien accidentalmente se apodera de una joya muy costosa, llamada la Estrella de Kusrdistán, y es perseguido por dos agentes federales en un delirante periplo internacional que lo trae hasta la Triple Frontera y las Cataratas del Yguazú. Cómicas travesuras con un trasfondo de espectacular vista panorámica.

Happy Together (1997). Celebrada película del realizador honkonés Wong Kar-Wai, ganadora en Cannes. Basada en el relato «The Buenos Aires affair» de Manuel Puig, narra la historia de una pareja de homosexuales de Hong Kong que viaja a conocer las Cataratas del Yguazú. Una relación tormentosa, en medio del cautivador marco de la Triple Frontera. Incorpora la clásica canción Happy Together (Felices juntos) del grupo The Turtles, en versión de Frank Zappa.

Miami Vice (2007). Una superproducción dirigida por Michael Mann, con Colin Farrel y Jamie Foxx. Se filmó durante una semana en Ciudad del Este, aunque incorpora muy poco de las escenas rodadas en la región. Presenta a la Triple Frontera como una región de marcados contrastes sociales, refugio de capos mafiosos y meca del narcotráfico. El villano de la película tiene una majestuosa mansión a orillas de las Cataratas del Yguazú.

Goodzilla 3D to the Max (2007). La versión para proyectar en 3D del clásico monstruo japonés, también se ambientó en la Triple Frontera. Dirigida por Yoshimitsu Banno, la temible criatura despierta de su hibernación muy cerca de las Cataratas del Yguazú y empieza desde allí a sembrar el terror, trasladándose luego a México y concluir la batalla en Las Vegas.

Indiana Jones y el reino de la Calavera de Cristal (2008). La esperada cuarta saga de Steven Spielberg y George Lucas incluye una escena aérea de las Cataratas del Yguazú, en cuyos alrededores se ubica el misterio templo de alienígenas, a los que el veterano Indy hace frente, esta vez con su hijo. Aunque según el filme, las cataratas se ubican en el Amazonas.

Smallville 6ª temporada (2007). La serie televisiva de la Warner Bros que narra las aventuras juveniles de Clark Kent/Superman, incluye en su sexta temporada una escena en la que el protagonista aparece en las Cataratas del Yguazú, pero según la producción, estas se encuentran en la Patagonia Argentina.

Salve Geral (2009). Película brasileña dirigida por Sergio Rezende, realizador de celebrados filmes como Canudos y Lamarca, narra el gran ataque dirigido por miembros de la organización criminal Primer Comando da Capital (PCC), que paralizó Sao Paulo en mayo de 2006. La protagonista Lucía viaja a Ciudad del Este a hacer comprar, cruza el puente de la Amistad y recorre Foz de Yguazú. Se filmó durante dos semanas en la Triple Frontera.